El gobernador de la provincia ha ordeando que no se suspendan de sus funciones a dos colaboradores directos de Marcelo Sain; ambos aparecen en los escritos de la imputación que le hiciera el Fiscal Hernandez al ex ministro y sus colaboradores, acusados de graves delitos.
De los oficiales superiores mencionados en forma reiteradas en la imputación al ex ministro de seguridad; solo ha sido suspendido el comisario supervisor Ariel Montagner, sobre quien pesan innumerables irregularidades administrativas; según surge del texto elaborado por el Fiscal de Delitos Complejos, mientras se desempeñó como coordinador de la Agencia de Control Policial; y con mucho poder a partir de una afección de salud de la propia directora del organismo de esa época, Mariana Olivieri.
LOS IMPUNES
Sin embargo, hasta ahora nada se ha efectivizado, más que una mera resolución de Miguel Angel Oliva, jefe de policía para que la ex directora de la Agencia de Control Policial, Subdirectora Mariana Olivieri, siga a la espera de destino, cuando claramente aparece involucrada en desvió de fondos de los gastos reservados, junto a otra comisario de apellido Romegio; seguimiento a funcionarios, armado de causas penales a diferentes personas; acaso son todos complices?
El otro intocable de Omar Perotti, es Maximiliano Bertolotti, mencionado en la imputativa a “el picante”, como armarle una causa al empresario Nahuel Caputo de el Diario El Litoral; además confeso torturaror por ordenes del mismo Sain, quien termina diciéndole, que a un preso, “le practique un coma inducido”.
Este es el gobernador que en campaña hablaba de las dos veredas policiales, la de los buenos policías, y de aquellos que están del otro lado, “con una clara línea divisoria”, decía el mandatario santafesino.
Nada se ha hecho, un gobernador, un ministro, y un jefe de policía que son parte de este gran coctel de corrupción que hay en la provincia.
Estos sectores vinculados al delito, que nos gobiernan, que son un mal endémico, hay que erradicarlos, y si es posible que terminen todos en la cárcel.
