Perotti paralizó las obras en Bomberos Zapadores de Rosario, y Lastorta podría dejar el cargo

El Director de la Agrupación Bomberos Zapadores de la Provincia, Director General Andes Lastorta, cansado de la dilación en las obras del cuartel central de la ciudad de Rosario, según trascendidos, daría un paso al costado.
Hace cuatro años que los bomberos trabajan de manera incomoda, y así nos los han hecho saber varios de ellos a esta redacción en off; "el haber obstaculizado la salida por calle Córdoba nos generó muchos problemas", dicen por lo bajo.
Según una publicación de el Diario La Capital la historia es larga, aunque oficialmente se dice poco. Incluso desde el Ministerio de Infraestructura de la provincia responden escuetamente que hubo "problemas con la empresa adjudicataria", un trámite que ciertamente se inició durante la gestión socialista de Miguel Lifschitz, pero que la actual de Omar Perotti no resolvió ni retomó.
En esa fase, que llegó a iniciarse, estaba previsto intervenir sobre la tradicional fachada de Córdoba 2833, en el sector de la guardia y atención al público, además de realizar tareas en el edificio del museo. Una superficie total de 1.128 metros cuadrados, donde más de 402,35 metros correspondían a obras nuevas y una superficie abierta total de trabajo de más de 2.400 metros cuadrados, donde también estaba prevista una plazoleta.
Quienes conocen el cuartel afirman que más del 70 por ciento de las estructuras fueron derribadas sin que se construyeran los espacios nuevos. Allí trabajan 25 efectivos por guardia, que además tienen un taller mecánico para el mantenimiento y reparación de los equipos y vehículos: cuatro camiones, dos autobombas y dos cubas y cuatro camionetas, entre otros.
Por otro lado, Utrapol Noticias, con fuentes del cuartel rosarino de bomberos de la policía provincial sostienen que están hartos de estas situación, y quizá por eso el jefe Lastorta querría dar el portazo.

Desde el gobierno la situación la saben, la analizan, pero sin decirlo, dejan trascender que en épocas de vacas flacas y campaña flaca, no es urgente terminar la obra y menos si fue un puntapié de los antecesores.
También, en el gobierno le dan al reclamo un tinte político; ya que Andres Lastorta buscaría una excusa para renunciar, de todos modos lleva mas de treinta años de servicio; y buscar un cargo en el próximo gobierno, donde se juega a pasar la la Dirección de Bomberos a Defensa Civil, de la mano de Marcos Escajadillo, lo que ya le genera un enfrentamiento con la policía de seguridad, y una mirada poco amigable de sectores radicales del Frente Unidos.
Lo cierto, es que con este gobierno o con el otro; en la policía o en Defensa Civil, es necesario refuncionalizar las entradas y salidas de las autobombas por calle Córdoba.