El bolsillo del policía no da para más, y nadie se hace cargo de la ropa.

A pocos meses de terminar la gestión, el actual gobierno de Omar Perotti no ha licitado nunca la compra de uniformes para el personal policial; y solo realizó, una vez, un aporte que solo cubrió en 60 por cuento del equipo.
Desde los cuadros inferiores y medios, sostienen que en muchos casos las prendas son reparadas o estiran el lavado, o bien tratan que la reposición sea en tiempos de aguinaldo y lo necesario.
Hablamos con varios uniformados, uno de ellos fue contundente al sostener que "si tiene que ir a trabajar de civil con un buzo lo hará", ya que no puede destinar dinero de la familia a prendas de vestir de la policía.
Es cierto que el gobierno juega con la presión de que hay gente que tiene el paliativo del ingreso de los servicios adicionales, y que esto lo obliga al personal a adquirir la ropa de fajina.
Los policías esperan que el gobierno, tenga un gesto de abonar un dinero extra en concepto de uniformes, que quizás podría darse en el marco electoral, tratando de empatizar con los trabajadores; aunque el grueso ya decidió el no a Perotti.